29 enero 2011

Es este amor que enciende al corazón,
y el mismo amor será mi perdición.
Fui condenado a quererte sin razón,
es un hechizo de muerte y de dolor.
 
Y beberá mi sangre, y beberás mi amor.
Nada impedirá que te ame, que seas mía,
si corre por mis venas la pasión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.